sábado, 27 de noviembre de 2010

MI DOMINGO DE RAMOS

Os voy a contar como es para mí ese día tan importante para todos los cofrades, el    Domingo de Ramos, ese día que tiene que radiar el sol que todos soñamos para inaugurar un año más nuestra bendita Semana Santa, ese día en el que termina una larga espera y un sin fín de preparativos.

En mi caso, en Semana Santa suelo ir todos los días de la semana a ver las cofradías de Sevilla, pero el domingo no, el domingo es distinto. Debido a que la cofradía  de la que soy hermano y salgo de costalero (Hermandad De la Sagrada Entrada) hace estación de penitencia ese Domingo de Ramos. Es un día de cosquilleos en el estomago desde que me despierto, sobresaltado pensando que es el día. Suelo ir a la misa de palmas que se celebra por la mañana y de camino ver a mi Virgen y mi Señor dispuestos a pasearse por el viso. Después de darme la vueltecita matinal vuelvo a mi casa, como mientras veo la salida de la Paz de Sevilla (bonito momento hasta por la tele) y así termino de creerme que es Domingo de Ramos. Apenas me da tiempo de echarme un ratito en el sofá cuando ya tengo que ir a ducharme y vestirme de blanco.

Comienzo a andar hasta  la casa parroquial donde quedamos los costaleros y capataces de Mª. Stma. de la Paz. Una vez todos allí el capataz empieza a hablar cosas bastante bonitas (momentos para no olvidar) sobre como nos ha ido la cuaresma en cuanto a los ensayos, motivarnos diciendo lo bien que lo vamos a hacer y sacarnos unas cuantas lagrimas. Este 2010 ha sido mi primer año como costalero de Mª. Stma. De la Paz y en éste mismo me han llamado por primera vez debajo de un paso de verdad (gracias a la gran amistad que me une con el 2ºcapataz) y no de pasitos de los que hacíamos cuando pequeños. Sonaron más de un: Rubén! Diimeeeeee! De los cuales disfrutamos como si tuviéramos 5 años, momentos que se te quedan guardados y que merece la pena vivir si verdaderamente te gusta esta bendita afición de sacar pasos.

Durante el recorrido disfruté tanto fuera del paso, como dentro. Momentos a resaltar debajo del paso como la salida, el relevo de antes de llegar a la capilla del Rosario y convento, en este último disfrutas y sufres a la vez (algo inexplicable). Por fuera el momento mas bonito que he vivido es cuando llega la virgen a la parte mas estrecha de la calle real, impresionante esa chicota, y como no, la entrada, esa entrada que comienza desde que empieza a subir la Lonja hasta que entra por las puertas. Resalto estos momentos porque me parecen los más especiales en mi opinión, pero el recorrido en sí es bastante bonito.

Después de la recogida, cogimos cuatro cansinos y nos fuimos a Sevilla vestidos de costaleros y sin cenar nada, solo una tableta de chocolate por el camino, a ver lo que buenamente pudimos…

A continuación os voy a poner una foto y un video (en convento) donde suena una de esas llamadas de capataz a costalero, de amigo a amigo.



3 comentarios:

  1. Y quien no pueda... vamono la gente güena de verda.. la gente que puede pasear a la Madre de Dios porque poco a poco va sabiendo!!! que aquí hay Domingo de Ramos!!!

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