Ya está aquí nuestro amigo Lorenzo, ese que dentro de poco no te deja pisar la calle desde las 12 de la mañana hasta las 8 de la tarde al no ser que tengas donde darte un buen chapuzón y ponerte bien fresquito. Este verano va a ser un poco distinto para mí, ya que cambio de vivienda para poder hacer esos chapuzones lo más rápido posible, tiene que sentar bien un buen bañito fresquito y después un buen lote de comer… Ojú que mieo de veranooo. Pero también influye negativamente en mí debido a que no tengo como irme al viso cuando a mí me dé la gana, lo que significa que no voy a poder estar con mis amigos cuando me dé la gana (tendría que haber hecho caso cuando me decían que me sacara el carnet de la moto…). Esperemos que me haga escapaditas a la costa a darme unos baños de agüita salá, a ver que me viene preparando mi amigo Lorenzo.
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